Los datos de un teléfono y reloj inteligente llevaron a un hombre a confesar el asesinato de su esposa

La evidencia estaba en el teléfono y el reloj inteligente. Un piloto de nacionalidad griega llamado Babis Anagnostopoulos tuvo que confesar que asesinó a su esposa, pues los dispositivos inteligentes lo delataron.

Originalmente, Anagnostopoulos había dicho que su esposa había muerto cuando unos ladrones la asesinaron durante el robo a su casa.

Según la versión original del hombre, los ladrones lo ataron para efectuar un robo y asesinaron a su esposa.

Los investigadores tomaron el reloj inteligente de la víctima y se dieron cuenta que el registro de la frecuencia cardiaca de ella estaba activo al momento que el esposo había dicho que había muerto.

Mientras tanto, el monitor de actividad física del teléfono del piloto mostraba movimientos de él dentro de la casa durante el tiempo que según él estaba atado por los ladrones.

Babis Anagnostopoulos fue abordado por la policía griega tras el funeral de la mujer y tuvo que confesar el crimen ante las revelaciones de los dispositivos móviles.

Luis Ortiz Chaves

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